CIUDAD DE MÉXICO.- La noche del pasado lunes 7 de diciembre autoridades universitarias y elementos de vigilancia UNAM fueron responsabilizados por la integridad física de una activista universitaria que fue golpeada cuando se retiraba de la toma de la Dirección General de Administración Escolar (DGAE).
“Ante el incumplimiento y amenazas hacia nuestra integridad física se escalará el nivel de la protesta”, escribieron los universitarios al señalar que convocarán a una asamblea estudiantil para el próximo viernes 11 de diciembre dentro de esta dependencia de la UNAM.
Los estudiantes que podrían ser menores de edad fueron golpeados, como se constató en fotos y audios; incluso los alumnos divulgaron las placas de las patrullas de vigilancia: 873-ARC y Z35-BCS, en las cuales viajaban los elementos que los reprimieron por exigir modernización en los trámites de titulación detenidos por la pandemia y la mala burocracia universitaria, como acusan, entre otras demandas.
Además, las autoridades se atrevieron a trasladar a un estudiante al MP de Coyoacán, por lo que los activistas llevaron a cabo “algunas protestas de mayor nivel para exigir la liberación del compañero (…) quien de no haber sido por la acción temprana, no hubiera podido ser liberado”.