La inflación anual del Índice Nacional de Precios al Consumidor sigue su trayectoria ascendente
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó este jueves que la inflación en México alcanzó el 7.37 por ciento a tasa anual durante noviembre pasado, su nivel más alto en 21 años, es decir, que desde enero de 2001 no se registraban cifras de tal magnitud, de acuerdo con informes del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), lo que ha quedado constato con aumentos en productos de la canasta básica que lesionan el bolsillo de los mexicanos.
La inflación es reflejo del aumento desordenado de los precios de productos y servicios, lo que deriva en alzas que afectan a los consumidores.
De acuerdo con el INPC, durante noviembre algunos artículos de la canasta básica tuvieron incrementos importantes como el tomate verde, que registró un aumento del 71.85%; otro que registró alzas fue el chile fresco en 30.66%; el chile serrano tuvo un aumento del 12.10%; el chile poblano un alza del 15.7%. Otros genéricos como la electricidad registraron un aumento del 24.16%.
Asimismo, otros productos que durante el año han mostrado alzas y afectado con ello el bolsillo de los ciudadanos es el aguacate, con un 45%; la cebolla con un 44%, el jitomate con 39.19%, mientras que por el lado de los energéticos el gas LP tuvo un alza del 23.97%.
El presidente del Inegi, Julio A. Santaella, destacó en su cuenta de Twitter que “el índice nacional de precios al consumidor se incrementó 1,14 % mes contra mes, el mayor aumento para dicho mes en 21 años, mientras que la inflación anual quedó en 7,37 % año contra año, 1,13 puntos más que en octubre”.
En octubre pasado, México registró una tasa de inflación del 6,24 % -era su mayor nivel desde 2017- después de que los precios subieran en el décimo mes del año un 0,84 %.
El índice de precios subyacente, considerado un mejor parámetro para medir la carestía general porque elimina artículos de alta volatilidad en sus precios, aumentó el 0,37 % mensual y dejó la tasa anual en el 5,67 %, según señaló el Inegi en un comunicado.
Dentro del subgrupo de bienes y servicios subyacentes, las mercancías aumentaron el 0,31 % y los servicios crecieron un 0,43 %, con una tasa anual del 7,24 % y del 3,92 %, respectivamente.
En los no subyacentes, los agropecuarios aumentaron un 4,48 % respecto al mes anterior y los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno aumentaron 2,64 %.
A nivel anual, los precios de los agropecuarios han crecido un 14,36 %, mientras que las tarifas energéticas se han elevado un 11,26 %.
De este modo, la partida de no subyacentes aumentó un 3,45 % mes contra mes y aumentó un 12,61 % interanual.
Por último, el índice de precios de la canasta de consumo mínimo, conformada por 176 productos y servicios, presentó un aumento del 1,27 % mensual y del 8,35 % interanual.
El Inegi también anunció que en noviembre el índice de precios al productor, incluyendo el petróleo, presentó una variación al alza del 0,99 % respecto del mes anterior, alcanzando una variación anual del 9,90 %.
La reactivación económica en México llegó tras dos meses de suspensión de todas las actividades económicas no esenciales, en abril y mayo de 2020, debido a la crisis del coronavirus, lo que tuvo un fuerte impacto en la producción y el consumo.
La inflación de 2020 cerró en un 3,15 %, mientras que en 2019 la inflación fue del 2,83 % y en 2018 los precios al consumidor se elevaron un 4,83 %.
Los precios al consumidor escalaron hasta el 6,77 % a finales de 2017, la tasa más alta desde 2000, que fue motivada por un alza en el precio de los combustibles.
La meta del Banco de México es del 3 % anual.