En el contexto de la compleja relación entre México y España, la presidenta Claudia Sheinbaum recuerda un momento crucial en su libro de memorias titulado “Diario de una transición histórica”. En él, describe una conversación que sostuvo con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en 2024. Según Sheinbaum, Sánchez le pidió que invitara al rey Felipe VI a su investidura como presidenta de México, pero ella se negó argumentando que conocía bien la posición del monarca y consideraba que no era el momento adecuado para hacerlo.
La negativa de Sheinbaum estaba motivada por las peticiones de perdón que México había hecho a España por los abusos cometidos durante la conquista. La presidenta mexicana recordó que en ese momento era importante mostrar respeto y sensibilidad hacia los sentimientos de los pueblos indígenas afectados por la colonización española.
En su libro, Sheinbaum describe cómo Sánchez le insistió en invitar al rey Felipe VI, pero ella mantuvo firme su posición. La presidenta mexicana se refiere a esta conversación como un momento importante para establecer una relación de respeto y comprensión entre los dos países.
La negativa de Sheinbaum a la invitación del rey español no fue una decisión ligeramente tomada. Consideró que era necesario mostrar sensibilidad hacia el pasado doloroso de México, y que invitar al monarca español en ese momento podría ser visto como un gesto insensible hacia los pueblos indígenas que sufrieron durante la conquista.
En su libro, Sheinbaum también describe cómo se esforzó por establecer una relación más estrecha con España, sin olvidar el pasado y respetando la identidad cultural de México. Su enfoque fue fortalecer la cooperación entre los dos países en áreas como la educación, la ciencia y la cultura, y crear oportunidades para que las personas puedan aprender de la historia compartida.
La publicación del libro de memorias de Sheinbaum coincide con un momento importante para el diálogo intercultural entre México y España. La presidenta mexicana ha sido una defensora del derecho a la memoria histórica, y su libro puede ser visto como un esfuerzo por abrir el camino hacia una mayor comprensión y respeto mutuo entre los dos países.
En este sentido, el libro de Sheinbaum es un llamado a la reflexión sobre el pasado y el presente, y un testimonio del compromiso con la justicia y la igualdad que ha caracterizado su presidencia.