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Morena no es invencible para el 2024: Eduardo Rivera

El edil de Puebla marca sus diferencias con el gobernador Barbosa, pero subraya que mantendrá el diálogo y la colaboración con él

El PAN y la alianza de partidos opositores a Morena pueden ganar las elecciones locales del 2024, afirmó el presidente municipal de Puebla y militante del blanquiazul, Eduardo Rivera Pérez. “Va a depender de muchas cosas, pero esa es la magia de la democracia, que la última palabra la tienen los ciudadanos y ellos son los que van a decidir el rumbo del estado”, abundó.

Rivera Pérez hace un corte de caja a ocho meses del arranque de su gobierno. Resalta los avances logrados en la ciudad y responde sin limitaciones las preguntas que este diario le hace sobre política, temas de partido y la relación con el gobernador Miguel Barbosa, la que pide analizar desde dos planos: el personal y el institucional.

¿Qué lectura te deja la elección del pasado 5 de junio en seis estados?, ¿Morena es invencible?

Yo creo que no, yo creo siempre en los momentos políticos. Por ejemplo, este escenario que analizamos del pasado proceso electoral es que no un partido se lleva todo y otro pierde todo. Yo creo que cada proceso electoral, en cada entidad, es distinto, en cada época, en cada momento. Depende mucho de los candidatos y me parece que habrá mucha tela de dónde cortar de lo que viene en el futuro político de nuestro país.

¿La alianza opositora y el PAN pueden ganar Puebla en el 2024?

Indudablemente sí. Va a depender por supuesto de muchas cosas, pero ese es el proceso electoral y esa es la magia de las campañas políticas, pero sobre todo la magia de la democracia, que la última palabra no la tenemos nosotros como actores políticos, o los analistas, o los periodistas, la tienen los ciudadanos, y ellos son los que van a decidir el rumbo del estado, del país, y la opinión, la decisión ciudadana es sagrada.

¿Qué opinas de las etiquetas y de las clasificaciones políticas: “derecha”, “izquierda”, “conservadores”, “liberales”, “chairos”, “fifís” y de todo ese discurso que regresó a nuestro país de la mano de la cuatroté?

Yo no creo en la geometría política y tampoco creo en los absolutos de estas clasificaciones, pero sí creo que ha habido una polarización que, en mi opinión, poco le trae de beneficios al país (…) poco ayuda uno como autoridad en estar generando polarización y conflicto con los sectores sociales, ya sea con los ambulantes, con los trabajadores, los empresarios. Yo creo más en una política de diálogo, de debate democrático, de la discusión, de la diferencia, pero siempre buscando un punto de encuentro para afrontar los retos (…) Sí influyen los partidos, pero a la gente en la calle le interesan más las personas y los resultados

Fuiste postulado por cinco partidos políticos, pero eres panista. ¿Cómo defines tu gobierno?, ¿es de derecha?

Mi gobierno es un gobierno de coalición y por definición propia yo te diría que es un gobierno de centro. Aquí en mi gobierno hay personas destacadas del PRI, del PRD, del PAN, de México Libre (que intentó convertirse en partido), de Compromiso por Puebla, del PSI, y la mayoría es gente sin partido. Yo en verdad creo que sí es importante la idea, sí es importante la doctrina, yo tengo mis ideas y mis principios perfectamente claros, pero yo no se los puedo imponer a la sociedad. Lo que la sociedad quiere es que haya buenas gestiones de gobiernos, y gestionar un gobierno son en verdad retos enormes. Tramitar los presupuestos, hacer los proyectos ejecutivos, tomar las decisiones de las obras correctas, y creo que es ahí donde me parece que debemos poner el acento, más que en el asunto de la geometría política.

EL GOBERNADOR Y YO PENSAMOS Y OPINAMOS DIFERENTE
¿Qué pasó en la relación con el gobernador Barbosa? Empezaron muy bien, pero hemos visto que las cosas han cambiado.

Yo lo que te diría lo pondría en dos planos. El primer plano, el personal, que el gobernador y yo hemos tenido una amistad desde hace años. Nos hemos tratado también en lo familiar en algunas ocasiones, y podría decir eso, que hay una buena relación de amistad, personal. Hay un reconocimiento (de mi parte), lo veo como un político profesional, que tiene una experiencia y una trayectoria que él mismo ha labrado con el paso de muchos años (…) nos conocemos desde el año 2000 que coincidimos en la diputación federal y además en la propia comisión de Gobernación.

Pero también, hay que decirlo, hay una relación institucional, en donde él tiene una responsabilidad y yo tengo otra. Yo le respeto en ese ámbito y él me respeta en ese ámbito. Yo no he tenido absolutamente ninguna injerencia del gobernador respecto a mi función como presidente municipal, y eso se lo reconozco y lo respeto. Pero también es importante decirlo: opinamos y pensamos diferente, traemos trayectorias diferentes, y yo no voy a hacer de eso tampoco un pleito, porque lo que se requiere es hacer equipo, y lo que yo he procurado con el gobernador del estado es eso, hacer equipo. Yo siempre estaré haciendo ese esfuerzo, de colaboración, porque los retos que tenemos tanto él como yo son muy importantes y tenemos que trabajar en conjunto.

¿Atraviesa por un mal momento esta relación?

No, yo te diría que a veces hay opiniones distintas, de hecho él ha comentado algunas de manera pública. Yo soy respetuoso del estilo de cada persona. El mío es este, el que me conoces de siempre, el que me conocen los poblanos de siempre, del diálogo, el acercamiento y el acuerdo. La relación institucional yo hoy la califico buena. Por ejemplo, no hemos dejado de coordinarnos en un tema tan importante como es el de la seguridad (…) En el tema del agua hemos venido acercándonos. Están trabajando las áreas técnicas y posteriormente habrá una postura en conjunto, pero tratamos cada quien de hacer nuestro trabajo y tratamos, de mi parte, siempre buscar este diálogo y este entendimiento.

¿Estas diferencias de opinión se parecen a lo que viviste con Rafael Moreno Valle en tu primer periodo como presidente municipal?

Yo creo que son cosas distintas. Son personajes y actores totalmente distintos, épocas distintas, problemas distintos, retos distintos (…) considero que en este reto del gobierno y las personas que los lideran, siempre tenemos nuestros propios estilos, nuestras propias habilidades, nuestros propios defectos, y a mí en lo particular siempre me llama que, en cualquier decisión que yo tenga que tomar, de la administración del gobierno de la ciudad en coordinación con el gobierno del estado, siempre tengo que estar pensando en lo mejor para Puebla, por encima (de que) si (con) algún gobernador, en el pasado o en el presente, podamos tener diferentes formas de hacer las cosas. A la gente lo que le interesa es eso, no qué tanto somos cuates y no cuates, sino qué tan eficientes somos para generar soluciones para las ciudades, para los estados.

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